Chronicle Herald: Cinco maneras que Nueva Escocia podria mejorar la vida de los trabajadores migrantes
STACEY GOMEZ • Opinión de invitado
Stacey Gomez colabora con Nadie es ilegal, el Programa de Trabajadores Migrantes de Halifax/Kjipuktuk y es miembro del Grupo por los Derechos de los Trabajadores Migrantes de Nueva Escocia.
En las mesas de comedores y en los campos de Nueva Escocia, los trabajadores inmigrantes están teniendo conversacione sobre cómo es vivir y trabajar en esta provincia, y qué es necesario cambiar. Antes de las elecciones provinciales del 17 de agosto, más de 100 trabajadores migrantes compartieron sus voces con nuestra organización, Nadie es ilegal, Halifax/Kjipuktuk, en respuesta a una encuesta informal que enviamos. El resultado es la base de una agenda dirigida por trabajadores migrantes en Nueva Escocia para el cambio.
La mayoría de quienes hablaron con nosotros son trabajadores migrantes jamaicanos y mexicanos en el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales (SAWP, por sus siglas en ingles), así como trabajadores migrantes en el sector de procesamiento de productos del mar. Muchos vienen aquí año tras año, hasta por ocho meses al año. Contribuyen significativamente a la economía y son la columna vertebral del sector agrícola en Nueva Escocia. A pesar de no poder votar, son miembros importantes de nuestras comunidades.
Estos son los cambios clave que están pidiendo a nivel provincial y la razón por la que todos deberíamos prestar atención:
1. Incrementar el salario mínimo. Los trabajadores migrantes están sumando sus voces al llamado para aumentar el salario mínimo en Nueva Escocia a $15 por hora. Muchos vienen a Canadá para mantener a sus familias, pero tienen dificultades para llegar a fin de mes con el salario mínimo de Nueva Escocia de $12.95 por hora. El trabajo que realizan los trabajadores migrantes es físicamente demandante y, a menudo, por largas jornadas bajo sol o lluvia. “Sería bueno para ellos aumentar el salario mínimo, ya que el salario aquí es barato en comparación con Ontario y Columbia Británica”, dijo un trabajador agrícola mexicano en el programa SAWP. De hecho, en Ontario el salario mínimo es de $14.25 la hora, mientras que en la Columbia Británica es de $15.20 dólares la hora.
2. Diez días de enfermedad pagados. Una incapacidad por enfermedad remunerada que sea universal, permanente y accesible es importante para garantizar la protección de la salud de los trabajadores, sus familias y las comunidades. Actualmente, según el Código de Normas Laborales de Nueva Escocia, los empleadores solo están obligados a proporcionar un máximo de tres días de enfermedad no remunerados para todos los trabajadores. “Cuando tomé mi segunda inyección de la vacuna, estaba enferma; no pude ir a trabajar durante 1.5 días. Ni siquiera recibí un pago. Ni siquiera recibí un centavo y no fue mi culpa. Perdí mi salario sin compensación”, compartió una trabajadora migrante de Jamaica, quien apoya el llamado a días de enfermedad pagados. Si bien se nos dice como trabajadores que nos quedemos en casa si nos sentimos mal, particularmente durante la pandemia de COVID-19, algunos trabajadores simplemente no pueden permitírselo. Si se quedan en casa, significa recibir un golpe financiero. Además, los trabajadores migrantes, que son particularmente vulnerables a sufrir abusos en el lugar de trabajo, a veces se ven obligados a trabajar a pesar de estar enfermos.
3. Pago de días feriados. Si bien la mayoría de los habitantes de Nueva Escocia tienen acceso a la paga de vacaciones, este no es el caso de la mayoría de los trabajadores agrícolas migrantes. Si bien el Código de Normas Laborales de Nueva Escocia otorga a los empleados que califican seis días feriados pagados, "la mayoría de los empleados agrícolas" están excluidos de estas reglas. Esto significa que los empleadores de trabajadores agrícolas migrantes, así como otros trabajadores agrícolas, no están obligados a pagarles vacaciones. Los trabajadores migrantes piden un cambio en la regla, que consideran injusto y excluyente.
4. Atención medica para todos. Desafortunadamente, la mayoría de los trabajadores migrantes en Nueva Escocia no tienen acceso a la atención médica pública. Para los no residentes con permiso de trabajo, el permiso debe tener una vigencia mínima de 12 meses para poder inscribirse en el plan de salud provincial. Sin embargo, los trabajadores agrícolas migrantes en el SAWP solo pueden trabajar hasta ocho meses al año en Canadá. En Ontario, los trabajadores de SAWP son elegibles para el plan de salud provincial tan pronto como llegan. “No tenemos acceso al sistema de salud, pero pagamos impuestos igual que cualquier otro residente o ciudadano canadiense, sin recibir los mismos beneficios”, dice un trabajador mexicano del sector de procesamiento de productos del mar que ha estado trabajando en Canadá durante dos años, pero no tiene acceso a MSI. Los trabajadores migrantes en Nueva Escocia deben depender únicamente de un seguro médico privado, que pagan a través de deducciones hechas por su empleador. Esto puede dejar a los trabajadores migrantes vulnerables, por ejemplo, cuando hay retrasos en la recepción de su cobertura, retención por parte del empleador de su tarjeta de seguro de salud, etc. Además, el sistema de seguro de salud privado puede ser difícil de navegar y existen varias barreras para acceder. A menudo, los trabajadores migrantes no reciben información sobre lo que está cubierto y deben pagar por adelantado los servicios médicos y luego solicitar un reembolso a la compañía de seguros. Durante la pandemia de COVID-19, hemos visto cómo la falta de acceso a la atención médica pública ha contribuido al acceso desigual a las vacunas para los trabajadores migrantes, así como para otros inmigrantes.
5. Acceso a la residencia permanente. Los trabajadores migrantes están reafirman su petición de estatus migratorio completo y permanente en Canadá. Además, están pidiendo un programa provincial de inmigración que sea accesible para los trabajadores agrícolas migrantes. La residencia permanente significaría no tener que dejar atrás a sus familias para venir a trabajar aquí, tener la capacidad de ejercer los mismos derechos laborales y humanos que los canadienses sin el temor de ser enviados de regreso a su país de origen por su empleador, así como el acceso a servicios públicos como el cuidado de la salud. “He estado viajando en el programa durante unos 15 años, por lo que Canadá es básicamente mi segundo hogar. Soy un hombre de familia, y dejar a mi esposa e hijos todos los años es muy difícil, pero sé que es algo que tengo que hacer”, dijo un trabajador agrícola migrante jamaicano en el programa SAWP. Agregó: “Trabajo muy, muy duro todos los días cuando estoy aquí, y lo único que quiero es mejor trato, más respeto, más beneficios y que el gobierno ofrezca ayuda a quienes deseen migrar aquí porque Canadá es un país de familia, y creo firmemente en mi familia y los quiero aquí conmigo ". Algunos trabajadores migrantes han estado viniendo aquí durante 10, 20 e incluso 30 años. Sin embargo, la residencia permanente está fuera del alcance de la mayoría debido a una serie de limitaciones. Si bien son trabajadores esenciales, el sistema de inmigración de Canadá los considera "poco calificados", lo que limita los programas de inmigración disponibles para ellos. Los programas provinciales a los que podrían solicitar están pensados con impedimentos, incluida la necesidad de una oferta de trabajo para un puesto permanente de tiempo completo, requisitos de idioma inaccesibles y, en ocasiones, la necesidad de apoyo del empleador.
Estos cinco llamados a la acción remarcan áreas clave donde se necesitan cambios para garantizar un trato justo e igualdad de derechos para los trabajadores migrantes, así como mejores condiciones laborales para todos los habitantes de Nueva Escocia. Éstas deben ser prioridades en la agenda de cualquier gobierno de Nueva Escocia.
Nota: Los nombres, así como cualquier información de identificación, de los trabajadores migrantes que hablaron con nosotros han sido retenidos para proteger sus identidades.